El ratio financiero es la herramienta que permite a cualquier directivo conocer la salud financiera de su empresa.
Gracias a diferentes indicadores, como el índice de rentabilidad (calculado sobre el margen) o el volumen de negocio, el gestor puede gestionar su tesorería y garantizar la viabilidad de su empresa.
¿Qué es un ratio financiero?
Es un coeficiente, un índice o un porcentaje que muestra la relación entre dos datos financieros de una empresa, con el objetivo de comparar y evaluar los resultados financieros recogidos.
Las finanzas son por tanto un elemento clave para evaluar en qué situación se encuentra la empresa y el ratio financiero una forma rápida y directa de visualizarla.
De esta forma la empresa se asegura actuar rápidamente ante cualquier problema grave.
El ratio financiero puede dividirse en dos subcategorías:
- El ratio financiero interno: Se limita al ámbito interno de la empresa. Se refiere más a un análisis de resultados y excluye, por ejemplo, los datos de tipo contextual
- El ratio financiero externo: Se trata de un análisis más profundo y extenso de la información comparativa. Este ratio no sólo se limitará al análisis interno de la empresa, sino que podrá abrirse a cualquier hecho externo que pueda incidir (posición competitiva, etc.)
¿Por qué es necesario saberlo? Independientemente de su categoría, cada uno de estos ratios proporciona a la empresa datos cruciales sobre:
- Su rentabilidad (precio del producto, elección de las materias primas, etc.)
- Su estructura financiera (indicador de mercado, etc.)
- Flujo de caja
- Actividad global (indicador de eficiencia operativa, etc.)
Este ratio financiero también ayudará a consolidar el interés de posibles inversores.
Ratios financieros esenciales para cualquier empresa
Tiempo medio de pago a proveedores
Como su nombre indica, este ratio financiero indica el tiempo que tarda la empresa en pagar las facturas de proveedores o clientes.
Para calcularlo la fórmula que se utiliza es la siguiente: deudas con proveedores x 360 / total de compras con IVA incluido
Un plazo de tiempo óptimo para la empresa es aquel ni muy corto ni muy largo.
Si se realizan los pagos muy rápido, la empresa no se beneficia de las ventajas de los plazos de pago concedidos por los proveedores y si es demasiado largo, o incluso tardío (que supere los 30-60 días) se pueden generar problemas de tesorería, influyendo en la reputación y en el índice de confianza de tus proveedores.
Tiempo medio de cobro de los clientes
Este indicador mide la rapidez con la que una empresa recibe el pago de sus clientes.
Para calcularlo se utiliza la siguiente fórmula: créditos comerciales x 360 / volumen de negocio con IVA incluido.
Este ratio indica la eficacia de la empresa en la recaudación de dinero, es decir la eficacia al gestionar la entrada de dinero en su tesorería.
Como en todo, es necesario encontrar el equilibrio adecuado entre las fechas de cobro y su aparición real en las cuentas (tiempo de tramitación bancaria, retrasos, etc.)
Capital circulante neto global
Es uno de los ratios financieros más conocidos en la gestión de la tesorería.
Con ella, el gestor puede determinar la reserva de tesorería disponible tras deducir las liquidaciones de los empleos estables y los recursos estables.
Este coeficiente es una fuente de tranquilidad financiera adicional en caso, por ejemplo, de circunstancias imprevistas durante el periodo de actividad de la empresa. Se calcula de la siguiente forma: Activo corriente – Pasivo corriente.
Si el resultado es positivo la empresa es solvente y puede financiarse. En caso de déficit se interpreta que los recursos financieros son insuficientes, y la empresa no tiene capacidad para soportar las necesidades financieras.
Efectivo neto
Es el efectivo total que queda después del ciclo operativo e indica inmediatamente si la empresa tiene problemas de liquidez.
Para calcularlo:
Capital circulante neto global – necesidades de capital circulante o efectivo – pasivo financiero a corto plazo
Si obtenemos un resultado positivo los recursos de la empresa son suficientes para satisfacer sus necesidades a corto plazo. Pero si el resultado es negativo indica que la empresa debe recurrir al endeudamiento para evitar el descubierto bancario.
Ratio de rotación de existencias
Este ratio financiero mide la velocidad de rotación de las existencias.
Se calcula así: stock medio del año x 360 / Precio de compra de la mercancía
Si el retraso es prolongado, puede ser indicativo de un problema (dificultad para dar salida a las existencias, mala gestión del suministro), pero no siempre. Por ello, el directivo debe compararlo regularmente con el de sus competidores directos.
Si el plazo de entrega es corto, la empresa está gestionando muy bien su suministro.
Esperemos que esta información te haya sido ayuda para interpretar mejor el rendimiento financiero de tu empresa.
En Nopal puedes añadiendo estos y otros ratios relevantes podrás obtener información muy valiosa para tu empresa.