GESTIÓN DE CRISIS PYME

Muchas empresas se preguntan qué es una crisis empresarial exactamente. Podemos decir que se trata de una amenaza que surge de manera inesperada y que llega a poner en peligro el futuro de la compañía.

De hecho, si no se trata esa crisis de la manera adecuada, es muy posible que el negocio no solo peligre, sino que termine inmerso en un problema sin solución. Un plan de gestión de crisis es un documento que recoge todos los procesos que seguirá la empresa para responder a una situación que afecte de manera negativa a su rentabilidad, a su reputación o su capacidad para operar.

Aunque son muchos los tipos de crisis que pueden afectar a una empresa, lo normal es resumirlas en tres:

• Averías críticas: Las averías críticas abarcan todas las situaciones que están ocasionadas por fuerzas naturales o por las personas. 
• Emergencias sanitarias: Una emergencia sanitaria que afecta a una empresa tiene que poner en grave riesgo la salud de sus trabajadores.
• Ataques a la reputación: Internet y las redes sociales son herramientas muy útiles para las empresas, pero también se pueden volver en su contra. Los ataques a la reputación de un negocio pueden provocar una crisis que llegue a afectar a su viabilidad si no se ataja cuanto antes.

Una vez que conoces qué situaciones pueden llevar a tu empresa a una crisis, es importante descubrir qué aspectos debe incluir el plan de gestión. Por eso, hemos preparado el siguiente listado que engloba los principales pasos que debes dar para afrontar esta situación, son estos:

• Determinar las personas que formarán el equipo que gestione la crisis. Incluir qué persona será el máximo responsable y también quién será el portavoz.
• Establecer qué criterios se tendrán en cuenta para determinar el tipo de crisis.
• Mostrar qué señales pueden advertir de que la empresa está a punto de vivir una crisis o que ya está inmersa en ella.
• Elaborar un listado con los contactos de emergencia más importantes.
• Crear un listado con las personas a las que se debe notificar la crisis y de qué manera se hará.
• Fijar la forma en la que se estudiará cada situación.
• Señalar cómo se afrontará cada etapa del proceso de crisis.
• Diseñar una estrategia para publicar lo que está sucediendo.
• Implementar un proceso para comprobar cómo funciona el plan para gestionar una crisis empresarial y para introducir los cambios que sean necesarios.

Llevar a cabo un plan de crisis es de vital importancia, ya que permite a la empresa estar preparada para lo que pueda pasar y tener definido un plan de acción en lugar de tener que improvisar cuando surge un problema.

El plan de crisis es útil para reducir los efectos que puede generar una crisis, evitar momentos de indecisión e incertidumbre y gestionar la situación a tiempo y de manera eficaz. Además, permite que los responsables estén preparados, sepan cómo tienen que actuar y aborden las crisis de una manera más tranquila y sosegada.

También permite definir cómo comunicar a la sociedad el problema, sus motivos y su posible solución antes de que la situación se descontrole. Por tanto, el plan de crisis es una buena forma de mantener la reputación e imagen de la marca.

La comunicación es esencial en cualquier momento, pero se vuelve imprescindible cuando se vive una crisis empresarial. Se debe trasmitir lo que está sucediendo tanto a los responsables de su gestión como al resto de empleados e incluso a los medios de comunicación o a los clientes.

Una buena estrategia de comunicación establecerá la forma en la que se notificará lo que está sucediendo, de qué manera se hará saber cómo se está gestionando la situación y cómo evoluciona.

La comunicación interna es esencial para que se pueda gestionar el problema y también para comunicar a todo el equipo cómo debe actuar. De hecho, sin una buena comunicación se pueden cometer distintos fallos al actuar, que pueden agravar el problema.

Es vital que dentro del equipo encargado de gestionar la crisis se determine quién será el portavoz, como ya hemos comentado. Además, se debe establecer qué información se trasmitirá y también en qué momento se hará. Por supuesto, será necesario tener claro los canales que se utilizarán en cada situación.

Está claro que contar con un plan de gestión empresarial es vital para cualquier negocio y ahora ya sabes los pasos que debes dar para elaborarlo.

Tan importante como planificar un plan de crisis y estructurar bien los pasos a seguir es evaluar el funcionamiento del mismo una vez ha sido implementado.

Medir el funcionamiento del plan de crisis nos permitirá realizar ajustes y cambiar aspectos del mismo que permitan que, en la próxima ocasión, resulte todavía más útil para minimizar los efectos de una crisis para nuestra empresa.

Recuerda que la optimización es siempre un paso imprescindible en cualquier estrategia empresarial, así que no escatimes recursos en comprobar qué tal han funcionado las acciones ejecutadas e implementar otras nuevas si es necesario.